Iba yo un día por la calle tan distraída cavilando en mis cosas cuando de pronto uno de esos chicos de ¿tienes un minuto? Me disparó con su enorme boca sonriente. Y yo debía tener el día torcido porque pensé que la boca debía de ser lo único que tenía enorme, porque era más bien bajito el mozo.
El tema es que yo siempre tengo una buena excusa para no tener el famoso minuto, o bien porque realmente no tengo tiempo para pararme o bien porque lo que menos me apetece es que me intenten vender algo que sé de antemano que no quiero comprar (llámese tarjeta de un banco o colaboración con una ONG, da igual). Pero ese día, por motivos que escapan a mi razón, me paré y le dije “bueno, depende” y a la vez que lo decía, vi la chaqueta que llevaba, el logo era el de la AECC, Asociación española contra el cáncer. Sería casualidad, pero era la primera vez que alguien de la AECC me paraba por la calle y tal vez por eso vacilé algo más. El chico empezó a hablarme en un tono muy cordial y tranquilo y yo, reponiéndome rápidamente de mi vacilación, le dije que tenía prisa y él me dijo que en qué dirección vas, te puedo acompañar un rato mientras te explico. Eso me llegó al alma y como el cáncer por A o por B a todos nos ha tocado y a mí también me ha tocado el alma, le hice caminar un ratito y luego me dio pena que debiera variar tanto su ruta y nos sentamos amistosamente en un banco. Lo que quería era que yo me hiciera socia, y yo, seguramente, también lo había querido siempre. Y me hice.
Así que espero que el por ahora exiguo dinero que voy a dedicar , que de hecho ya estoy dedicando, sirva para que muchos científicos puedan investigar. Para que mucha gente se pueda beneficiar y para que igual que hace muchos años la gente se moría de gripe y ahora no, podamos decir un día que antes la gente se moría de cáncer y ahora no.
Descubrí en ese momento que ese chico que me había parecido bajito y que tenía la boca enorme, tenía también otra cualidad inmensa, su generosidad.
Blog creado para compartir ideas, sentimientos, realidades... todo aquello que haga sentirnos mejor.
sábado, 17 de abril de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Archivo del blog
-
►
2016
(10)
- ► octubre 2016 (2)
- ► septiembre 2016 (1)
- ► abril 2016 (2)
- ► marzo 2016 (4)
-
►
2015
(10)
- ► octubre 2015 (2)
- ► septiembre 2015 (2)
- ► agosto 2015 (1)
- ► julio 2015 (2)
- ► marzo 2015 (2)
- ► enero 2015 (1)
-
►
2014
(16)
- ► diciembre 2014 (2)
- ► noviembre 2014 (1)
- ► septiembre 2014 (1)
- ► agosto 2014 (2)
- ► julio 2014 (1)
- ► junio 2014 (1)
- ► abril 2014 (3)
- ► febrero 2014 (2)
- ► enero 2014 (2)
-
►
2013
(31)
- ► diciembre 2013 (2)
- ► noviembre 2013 (2)
- ► octubre 2013 (1)
- ► septiembre 2013 (3)
- ► agosto 2013 (1)
- ► julio 2013 (2)
- ► junio 2013 (3)
- ► abril 2013 (3)
- ► marzo 2013 (5)
- ► febrero 2013 (6)
- ► enero 2013 (1)
-
►
2012
(20)
- ► diciembre 2012 (1)
- ► noviembre 2012 (3)
- ► octubre 2012 (4)
- ► septiembre 2012 (2)
- ► julio 2012 (2)
- ► junio 2012 (2)
- ► abril 2012 (1)
- ► marzo 2012 (2)
- ► febrero 2012 (1)
- ► enero 2012 (2)
-
►
2011
(18)
- ► diciembre 2011 (2)
- ► octubre 2011 (1)
- ► agosto 2011 (4)
- ► julio 2011 (3)
- ► junio 2011 (1)
- ► abril 2011 (3)
- ► marzo 2011 (1)
- ► febrero 2011 (1)
- ► enero 2011 (2)
-
▼
2010
(51)
- ► diciembre 2010 (2)
- ► noviembre 2010 (3)
- ► octubre 2010 (2)
- ► septiembre 2010 (4)
- ► agosto 2010 (4)
- ► julio 2010 (5)
- ► junio 2010 (5)
- ► marzo 2010 (5)
- ► febrero 2010 (4)
- ► enero 2010 (5)
-
►
2009
(38)
- ► diciembre 2009 (6)
- ► noviembre 2009 (6)
- ► octubre 2009 (8)
- ► septiembre 2009 (11)
- ► agosto 2009 (7)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta: